Marcha en Cuenca, la verdad.

Esto es lo que más me importa de la dichosa marcha en Cuenca, eso solo era una forma de dar una imagen ante la sociedad, una imagen de la mayor «zarpa» de posser e ignorantes del metal, ovejas del Eduardo (Prohibido) y de su dichosa lucha que más bien parece una aversión a su tan divinizado arte subterráneo. El que va entender de Metal, si ni le gusta, lo que a él le llama es el dinero y no el movimiento de Cuenca. Se va a la marcha porque su «cuyero» (local)está en peligro de que lo cierren, mejor para que dejen de existir tantos « melateros ».

Otra cosa, como van a mezclar metaleros con punks y por último con « emos », una cosa es la tolerancia y otra la ignorancia, somos géneros y estilos muy diferentes.

Los metaleros somos la realeza en comparación con la ideología punk, que se aproxima a la de los mendigos y adictos, peor esos dichosos « emo », sufridores, sin identidad, busquen su espacio y ganenselo y no sean unos arrimados, esperando ver si les sale algo para su tan sufrida vida, vergas de moditas.

El otro género que se ha sumado a la marcha, « los hijos del cielo en la tierra » (white metal), hipócritas, farsantes, valen verga tanto en escenario como fuera de él, al final no llegan a valer nada, tanto critican a los metaleros y pasan metidos con todos ellos. Vuelvo y repito una cosa es la tolerancia y otra la ignorancia. Y si tanto defienden a su religión por qué no tocan en sus iglesias (?), me queda la duda.

Por último, sin desmerecer a los buenos metaleros que asistieron a la marcha, gracias hermanos por hacer la diferencia ante tanto farsante y oportunistas. Pero, no olvidemos que es mejor la calidad que la cantidad.
Seremos hermanos del metal hasta el día que nuestros cuerpos dejen de existir en este mundo lleno de hipócritas, santos (entre comillas), drogadictos sin cerebro y una cantidad de gente sin identidad propia.

JPC
Cuenca, mayo de 2008.